¿ PREOCUPADO ?

Isaac Page cuenta la historia de un hombre pobre de Irlanda que iba caminando pesadamente hacia su casa. Le pasó por el lado un vagón tirado de un caballo, y el conductor se detuvo a para ofrecerlo llevar. El hombre aceptó y subió al asiento junto al conductor, pero seguía cargando su saco de papas en los brazos. Cuando el conductor le sugirió que lo colocase en el piso del vagón, el contestó amablemente y con su acento irlandés: "No quisiera molestarlo mucho, señor. Usted ya me está llevando a mí. ¡Yo llevaré las papas!"

Nosotros también hacemos lo mismo a veces cuando intentamos llevar las cargas de la vida preocupándonos en lugar de dárselas a Dios. No es de extrañarse que nos sintamos agotados, con corazones desfallecientes y desanimados. Toda circunstancia de la cual no tenemos el control se puede convertir en un " saco de papas"  si nos inquietamos y nos preocupamos por el resultado. Hemos de llevar algunas cargas, pero incluso esas  se vuelven más ligeras cuando confiamos en que el Señor nos dará la gracia para llevarlas.

La próxima vez que comiences a preocuparte, hazte esta pregunta :"¿Es ésta una carga que Dios quiere que yo lleve? ¿O desea que se le deje llevar a El? "

No tienes porque preocuparte por sobrecargar a Dios.


DIOS NOS DICE QUE LE DEMOS A EL LAS CARGAS QUE NOS AGOBIAN